lunes, 7 de junio de 2010

Demasiadas exigencias



En ocasiones siento que a las mujeres se nos exige demasiado. Ser buenas profesionales, ser buenas madres, ser buenas amas de casa, ser buenas esposas, ser buenas amigas, ser buenas …

Y todo para que después parezca que somos mediocres, o lo que es peor, si destacas mucho como madre te acusan de abandonar tu carrera profesional, si destacas como profesional te tachan de mala madre, si destacas como buena amiga resultas mala esposa, con cualquier combinación salimos mal paradas.

Hacemos las cosas sin darles ninguna importancia, como si llegar a todo fuera algo normal al alcance de cualquiera, y no es así, porque no todos pueden.

De nosotras depende que se nos reconozcan más nuestros esfuerzos.


2 comentarios:

  1. Yo creo que depende también de lo que nos importe el qué dirán... a mi me las trae más bien al pairo...

    Gracias por el consejo cremil!!

    Besos

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  2. No creo que lo importante sea lo que digan, en eso estoy completamente de acuerdo contigo. Es el reconocimiento al valor de nuestro esfuerzo.

    De nada, y además sale más barato que ninguna de farmacia.

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